Y la última historia de amor en nuestra universidad, la de la evaluación continua, sigue progresando. En el capítulo anterior vimos como unos apenados estudiantes se le declaraban a una continua de verdad mientras que la madre de la susodicha decía que tenían que firmar un acuerdo prenupcial antes de poder llegar a más...
Vale, puede que esa metafora no nos haya quedado todo lo clara que quisieramos, pero reconoceréis que es interesante (e inquietante teniendo en cuenta quien sería la madre de la criatura) plantearselo así.
Empecemos de nuevo.
El rector ha escrito una respuesta a la delegación... que aquí no tenemos muy claro a que responde ya que en ningún momento hace comentario alguno respecto al hecho de que, según la delegación, les dijeron que para poder tener el 100% (quien lo quisiese) en mayo tenían que tragar la pildora envenenada (somos unos poetas en Daily UC3M... y no tenemos abuela, por si no se nota). Ah, y menciona una serie de reuniones que, supuestamente, tuvieron lugar entre todas las partes implicadas para conseguir llegar a acuerdos y mejorar la calidad de nuestra educación (que para eso estamos aquí... vamos, eso creemos).
La respuesta de la delegación es que, aparentemente, sólo hubo dos reuniones (que son más de una, de manera que ya se puede hablar de varias...) y que lo del 100% para quien lo quisiese no era sólo una petición de los estudiantes sino también en las comisiones académicas. Además, parece ser que existe una necesidad de revitalizar la convocatoria extraordinaria ya que esa maravillosa gestión por parte de los encargados de ordenación académica hace que, en muchos casos, sea una convocatoria perdida para las asignaturas del primer cuatrimestre en grado.
Y, tras la noticia, nosotros también queremos sumarnos a los agradecimientos a todos esos profesores que hacen que merezca la pena estudiar una carrera. Ya que vemos día a día como son ellos quienes llevan ese gran trabajo del que habla el rector preparando la continua.